

Cuando ya tienes malestar físico, sudor, mareo, lentitud de movimientos, fatiga, etc… no luches más con el tráfico y con el calor. Descansa al volante.
No hace falta recordar que viajar en coche en pleno agosto es peligroso, pero no solo por los atascos y tráfico que hay, sino también por el calor.
Si en tus vacaciones te toca pelear, perdón quería decir conducir, ten siempre en cuenta los descansos.
Todo esto hace que nos distraigamos al volante.
Renueva y mantén al día el climatizado o aire acondicionado de tu vehículo. Evitarás posibles accidentes y viajarás más cómodo y seguro.